miércoles, 30 de diciembre de 2009

one day.


Escucho una canción, observo por la ventana a la gente paseando y de algún modo logro convencerme de que el tiempo no corre en mi contra. Luego hablo por teléfono con una amiga y me doy cuenta de que organizo mi vida tan bien como un pollo descabezado que corre por el pasillo salpicando de sangre las paredes. Pero la música suena y vuelvo a olvidarme de mis problemas. Un día más.

domingo, 27 de diciembre de 2009

Love Actually.


Siempre que me siento pesimista por cómo está el mundo, pienso en la puerta de llegadas del aeropuerto de Heathrow. La opinión general da a entender que vivimos en un mundo de odio y egoísmo, pero yo no lo entiendo así. A mí me parece que el amor está en todas partes. A menudo no es especialmente decoroso ni tiene interés periodístico pero siempre está ahí. Padres e hijos, madres e hijas, maridos y esposas, novios, novias, viejos amigos... Cuando los aviones se estrellaron contra las torres gemelas, que yo sepa, ninguna de las llamadas telefónicas de los que estaban a bordo fue de odio y venganza. Todas fueron mensajes de amor. Si lo buscarais, tengo la extraña sensación de que descubriríais que el amor en realidad, está en todas partes.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

Run Away.


- Dicen que un reloj que se para siempre es el presagio de alguna muerte - susurró Hyo mientras contaba los cajones de izquierda a derecha -. Uno, dos, tres...Aquí están las piezas del reloj...y los guantes - puntualizo, abriendo el cajón y sacando un par de guantes de látex que se guardo en el bolsillo del pantalón -. Cuatro, cinco...Seis.
Con calma, tiró del pomo oxidado atornillado a la madera. En su interior rodó un pequeño frasco de cristal con una tapa metálica. Era pequeño, y llevaba una etiqueta pegada. Sostuvo el frasco entre los dedos índice y pulgar, y se acordó de su gran pasión: las armas de fuego. Le encantaban los rifles y las pistolas. Tenia varias en su habitación. Las limpiaba y las cuidaba con esmero y, a veces, se pasaba tardes enteras acariciando sus fríos cañones o apretando suavemente sus gatillos. Junto a ellas, disponía también de un pequeño arsenal de balas y cartuchos a los que pocas veces había usado, exceptuando alguna que otra jornada de caza con los amigos.
Mientras miraba el frasco, lo agitó en el aire ante sus ojos y sonaron decenas de golpecitos secos. Hyo se acercó de nuevo a la ventana e hizo coincidir la etiqueta con una de las franjas de la luz que penetraban a través de ella. Leyó pausadamente la inscripción, deteniéndose en todas y cada una de las palabras y los números que se apretaban en el pequeño papel. Comprendió que se trataba de una formula química y admitió que no entendía nada, aunque sabía perfectamente el uso que debía dar a ese producto.
Despacio, giró la muñeca y dejó caer el pequeño bote hasta el centro de la palma de su mano. Entonces cerró el puño, apretando el frasco con fuerza y dejando escapar media sonrisa.
«Esta noche dormirán profundamente», pensó mientras cerraba la puerta del cobertizo a sus espaldas.

martes, 22 de diciembre de 2009

Anywhere.


Perdida.
Sin saber que hacer, cómo seguir. Era como si el tiempo se hubiera detenido. Me había acercado a los recuerdos, había ido a su encuentro en vez de rehuirlos. A pesar de lo mucho que pugnaba por no pensar en él, sin embargo, tampoco intentaba olvidarle.

En realidad no importaba, sabia que el nunca iba a regresar. Pero podía soportarlo, podría vivir con el dolor que supone todo esto.

No me parecía que el dolor se hubiera debilitado con el transcurso del tiempo, sino que, por el contrario, más bien era yo quien me había fortalecido lo suficiente para soportarlo.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Amityville Horror.


Cuando el cuerpo sufre, el espíritu crece.


Las casas no matan a las personas, las personas matan a las personas.


Su casa me aterroriza Sra Lutz.


Atrápalos y mátalos.

viernes, 18 de diciembre de 2009

10.


Te fuiste y fue todo diferente, y yo no lloro tu descanso, ni tu sufrimiento, lloro las noches, los meses y los años que no vuelven…
No hay manera de dar marcha atrás, el camino andado no se puede desandar y el futuro nos lleva por sendas irreconciliables. Hoy andarás también luchando contra tus molinos de viento, construyendo castillos en el aire, pescando ángeles y enfadándote por el trafico de los pájaros.

¿De que tamaño serán tus alas?.



Mario.

martes, 15 de diciembre de 2009

E.


La suave voz de Edward sonó a mis espaldas. Me volví a tiempo de verle subir la escalera del porche con su habitual fluidez de movimientos. La carrera le alboroto los cabellos. Me rodeo entre sus brazos de inmediato y me beso.

Aquel beso me asusto. Había demasiada tensión, una enorme desesperación en la forma en que sus labios aplastaron los mios...como si temiera que no nos quedara demasiado tiempo.

Sin dejar de besarme, me levanto en el aire para acomodarme mejor entre sus brazos y me levo hasta la casa como si fuera un bebe.

- Te quiero. - me susurro en el oído con sus fríos labios de piedra.

lunes, 14 de diciembre de 2009

Helada.


No dejaré que nadie se asome a mi interior (aunque intentaré no guardar nada allí dentro). Esconderé mucho mejor mis sentimientos (cuando no sea capaz de evitar sentirlos). Tendré una máscara para cada ocasión (ligeras, sonrientes, que combinen con todo). Mentiré con la mejor de mis sonrisas (ya sé hacerlo, sólo me falta practicar).

domingo, 13 de diciembre de 2009

Recuerdos infantiles...

Hablando con mi hermana sobre las meriendas que teníamos de pequeñas, me vino a la mente los veranos en casa de mi abuela. Nada más acabar las clases en el colegio, iba en taxi con mi padre a casa de mi abuela, lo primero que hacia era llamar a mis amigas desde la calle, todas vivíamos alrededor. Bajaban y jugábamos al escondite, o a la comba, al cascayu, a la goma...siempre teníamos un juego, nunca nos aburríamos. Después venían los mayores, nos quedábamos quietas mirando para ellos y cuando se iban, decíamos..."Iván es para mi"..."Pues a mi me gusta tu primo" y decíamos que de mayores nos íbamos a casar con ellos...Luego llamábamos a voces a las respectivas abuelas para que nos lanzaran el bocadillo por el balcón, o si hacia bueno, bajaban a la hierba con sillas de playa y se sentaban allí a hablar del mundo del corazón o cotilleaban sobre los vecinos del barrio. La merienda siempre era: un bocadillo de jamón york y queso y luego un plátano, o de nocilla y un plátano; pero también había macedonias y helados.
Después de comernos la merienda seguíamos jugando...A las ocho nos llamaban las abuelas, nos teníamos que bañar, cenar y para la cama...Al día siguiente, te levantabas, desayunabas cola cao con galletas o magdalenas mientras veias "Dinosaurio" o "Los Power Rangers", luego tenias que hacer los deberes, como no, los ejercicios de los libritos que tenian puntos para hacer las vocales y las frases o los de Vacaciones Santillana, yo los odiaba. Más tarde, siempre, sobre las 11.00 o las 12.00 una amiga te llamaba para ir a jugar...¿y a que jugábamos por la mañana? Pues a esas muñecas famosas rubias con marido e hijos incluidos, si, a las Barbies. Todas bajábamos nuestras Barbies, Ken's, la casa de la Barbie, el caballo, el coche...Luego nos intercambiábamos los zapatos o la ropa...Recuerdo que mi prima tenia toda clase de vestidos y de zapatos para la Barbie. Luego subías a comer, y hasta que no hicieras la digestión no volvías a bajar a la calle...
Unos años después, cuando creces un poco, te fijas en los chicos que había en tu grupo, recuerdo que en el mio, en un principio, solo habían 3. Javier, Carlos y David. Pero claro, estaban ya cogidos ¿no?. Eran uno o dos años mayores que nosotras, pero nos daba igual, ellos jugaban con nosotras a campos medios, a Javier siempre se le escapaba los playeros, o a hacer de "vigilantes de la playa", Carlos siempre era Matt, o también jugábamos a coger caracoles y hacer una familia, David los cuidaba bien.
Llegaron las maquinas, la Game Boy, y nos viciábamos a los pokemon dejando a las Barbies de lado; las bicis, los patines con los que más de una vez me abrí las rodillas, el patinete con el que saltabas los bordillos...Por las noches, los chicos y chicas mayores iban a los bancos que había detrás de la casa de mi abuela para fumar o liarse, amores adolescentes, y yo los espiaba por la ventana del baño para cotillear con las amigas. A más de uno, se le cayó el pelo por fumar allí. Recuerdo que una vez, en invierno, al hacerse de noche pronto, uno de los mayores nos contó una historia de "miedo" para que no fuéramos a los bancos, ahora la recuerdo y es una tontería, pero de pequeña me dio bastante miedo. Decía que arriba, donde había un monasterio de monjas, había fantasmas que por la noche gritaban y hacían ruidos. Y si te asomabas a la ventana o ibas por allí te cogían y te llevaban con ellos. Esa noche no dormí nada.
Después crecimos, algunos seguíamos quedando, y otros salían con más gente, y no iban a la plazoleta donde quedábamos, o a los bancos donde íbamos...
Poco a poco nos fuimos separando, a veces los veo por la calle, les saludo y recordamos todo esto, con risas y añoranza, con pena por crecer...

sábado, 12 de diciembre de 2009

Sigue...


Hay días en que me entra la tontera, y de repente doy vueltas en círculos, y la cabeza no me funciona, de tanto intentar comprender cosas que no se pueden comprender y me comporto de una manera que si me mirara en un espejo no me vería, y tan rara me pongo que hasta la gente se aleja, pero de repente, un amigo me hace sentarme, y nos quedamos mirando hacia arriba, y empiezo a respirar el aire de una mañana de otoño, y siento el sol en la espalda, y cuando empiezo a estar a gusto, mi amigo, como si retomara una conversación antigua, me dice "...el pasado está para todos, no vale la pena darle la vuelta, ¿ves allí adelante? pues sigue...", luego se levanta y se va, yo me quedo un rato pensando, y me digo "pues sí" y me levanto ya más tranquila, ya más siendo la que era antes y marcho meneando un poco la cola...

lunes, 7 de diciembre de 2009

Saw VI.


¿Te gusta la sensación de brutalidad?
¿Quieres una oportunidad? Yo te la daré.
A partir de ahora yo controlo todos los aspectos del juego.
Usted cree que es la vida la que tiene la última decisión sobre usted porque la muerte no tendrá reclamaciones en su alma, pero quizá este equivocado.


Escoge quien vive o quien muere.



El juego termino.

Message to Alice.


Dear Alice, you're disappeared like everything else. But who else can I talk to?...I'm lost, Alice. When you left - and he left - you took everything with you. But the absence of him is everywhere I look .


Time passes. Every tick that goes by...aches...like the pulse of blood behind a bruise...but in a way i'm glad. The pain is my only reminder that he was real...that you all were...

viernes, 4 de diciembre de 2009

Break the same.

The different stars tonight will somehow fade the same and all the tears we cry tell us we're made the same and when we fall aside let's hope we fall in place we built our different lives but they all break the same.